CONCHI MEDINA
Soy Conchi Medina, Licenciada en Psicología por la Universidad Complutense de Madrid con especialidad en Psicología Social, Master en Terapia Cognitivo-Conductual por el Centro de Psicología Bertrand Russel y cuento con la habilitación para realizar actividades de psicología sanitaria, cumpliendo con los requisitos establecidos por la Ley 33/2011, de 4 de Octubre General de Salud Pública.
He tenido el privilegio de formarme como Instructora en Mindfulness Transpersonal en una de las Escuelas con mayor trascendencia en nuestro país, la Escuela de Desarrollo Transpersonal, donde también me he formado como Especialista en Terapia Sistémica Transpersonal.
PSICOLOGÍA
TERAPIA COGNITIVO-CONDUCTUAL
CONSULTORA MINFULNESS
Mi historia
Me ha costado 10 años de idas y venidas, de multitud de formaciones variadas y variopintas. 10 años de dedicación y perseverancia para tratar de encontrar mi lugar y mi manera de llevar a cabo mi profesión, descubrir lo que puedo aportar y compartir, mi verdadera pasión y misión de vida.
Durante todo este tiempo son cientos las personas a las que he tenido la fortuna y el honor de acompañar en procesos y situaciones extremadamente dolorosas y limitantes. He trabajado con jóvenes y adolescentes, con tercera edad, con enfermedad crónica y limitaciones físicas tremendamente graves. He acompañado a multitud de personas en su camino de vuelta a casa y nada me hace sentir más plena que ser testigo de la profunda transformación al recorrer el camino entre “aquello que creen ser” y “lo que realmente son” y cómo eso supone un cambio radical en su vida.
Mi mayor acierto en la vida es confiar y apostar por aquello en lo que creo. De ahí han nacido mis mayores logros, dándome permiso para arriesgar y luchar por mis sueños asumiendo las consecuencias que de esas decisiones se despliegan. Gracias a eso hoy tengo la profesión con la que soñaba desde niña y tengo al tesoro más grande que la vida me puede dar, mi hijo.
Hace un año tomé una de las decisiones más duras a las que me he visto abocada en mi vida, decidí salir de lo que consideraba mi hogar para salvarme. Tuve que elegirme a mí. Dejando atrás el proyecto de vida al que había dedicado absolutamente todo, to-do, perdiéndome a mi misma en el proceso, dejando en segundo plano mis necesidades y anhelos, obligándome a estar y vivir una vida que realmente no me hacía feliz, pero que sentía “era la vida que debía vivir”.
Aposté por mi para poder hacer frente a mi vida y a mi responsabilidad como madre, como mujer y hoy mi vida es mucho más plena, ante todo y sobre todo, no tengo miedo a ser quien realmente soy, ni antepongo las opiniones o necesidades de los demás a las mías. He aprendido a decir SI a mi vida, a lo que soy y a lo que puedo llegar a ser y eso es lo que me gustaría compartir y desarrollar en ti.
Siempre tuve claro que quería acompañar y ayudar a los demás en sus procesos de vida, sea estos cuales sean. Hemos venido aquí a vivir la vida y aunque no siempre es happy merece el esfuerzo de vivirla con toda su intensidad, porque resulta realmente apasionante todo lo que se despliega en nuestro interior y en el mundo que habitamos y vivimos.
Soy una apasionada de la gente, del mundo interno que se despliega y tiene lugar en cada uno de nosotros.
Cada día me dispongo a recorrer todos y cada uno de los mundos que se me permite visitar, pues cada una de las personas que me permite asomarme a su vida, sus pensamientos y emociones, me da la oportunidad de observar y conocer un mundo completamente nuevo para mi. ¡Viajo a diario, qué regalo de vida!
Creo profundamente en el potencial de las personas para desplegar su verdadera esencia y en el coraje de atreverse a ser quien realmente son, no hay nada más satisfactorio en la vida.
Me gusta decir que de profesión soy malabarista, porque tengo una tendencia natural a involucrarme en diversos proyectos, cursos y quehaceres varios. Al igual que mi pasión, una de mis grandes satisfacciones personales la encuentro en la relación con los demás, la amistad íntima, profunda e incondicional es uno de los pilares fundamentales de mi vida.
Dentro de mis aficiones me satisface la práctica de diferentes deportes, los relacionados con la toma de conciencia, el trato amable y respetuoso al cuerpo como el yoga o el pilates. Pero también necesito descargar energía con deportes más activos como el fitboxing o correr.
El senderismo y el contacto con la naturaleza está siendo un descubrimiento para mi, pues no era consciente del lugar tan importante que ocupaba en mi vida. Soy persona de piedra y agua, de montaña y pinos, explotan mis sentidos y mi sensibilidad acentuada. Una experiencia que para mi se convierte en un espacio donde todo puede acontecer pues el magnetismo y la energía de la naturaleza no dejan de sorprenderme, regalandome emociones, sensaciones y percepciones que trascienden la individualidad llevándome a la sinergia y sintonía con el todo de la vida.
Necesito la música en mi vida, la música en directo me teletransporta a otro lugar, me evade, me eleva, me invade todos y cada uno de los sentidos y me regala una de las experiencias más transformadoras que he vivenciado nunca. Y con esto el baile, bailar es una de las actividades que más me permite expresar mi sentir más profundo a través de mi cuerpo, me libera y me ayuda a conectar con mi esencia más profunda. Cuando bailo lo hago con los pies y mi cabeza deja de hacer ruido.